9 jul 2011

Charlotte.


Siéntate y escucha mi historia. Comenzó una noche de verano pero estando tan frío como si estuviera en invierno. Una hermosa chica pasa por mi lado, sólo pude oler su deliciosa fragancia. Algún toque de flores y elegancia, he quedado impresionado. El viento ha susurrado su nombre… Su hermoso nombre. Oh, Charlotte, ¿qué hace tan tarde caminando por ahí? Su mirada me ha dejado sin aliento. Las palabras no son suficientes para deducir este hermoso sentimiento, fue algo metafóricamente inmediato. Oh, querida Charlotte. Ya siento que no puedo respirar sin que estés cerca. Déjame inspirarme en tu hermosa cabellera, he conocido a la chica más maravillosa. Entrégate a mi cuerpo, te lo suplico, ésta noche, ésta vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario